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Laos y Nicaragua amplían la protección contra la influenza con ayuda de los CDC y partes interesadas

Países ofrecen vacunas contra la influenza para trabajadores del sector de la salud, embarazadas y otras personas con alto riesgo de desarrollar complicaciones por la influenza

Mientras la temporada de influenza está finalizando en los Estados Unidos, otras partes del mundo se preparan para el comienzo de las suyas. Gracias a las guías de los CDC y los aportes de Partnership for Influenza Vaccine Introduction (PIVI), este año Laos vacuna contra la influenza estacional por tercer año consecutivo y Nicaragua vacuna a las embarazadas contra la influenza por segundo año consecutivo.

En Laos, una joven madre sostiene en brazos a su hija mientras recibe información sobre la influenza estacional.

Una beba duerme en los brazos de su madre fuera de la clínica de vacunación contra la influenza del concurrido hospital materno-infantil en Vientián. Laos, 2012.

Décadas de experiencia han demostrado que la vacuna contra la influenza es una opción eficaz en función de los costos para prevenir enfermedades relacionadas con la influenza, hospitalizaciones e incluso casos de muerte, inasistencia escolar y ausencias en el lugar de trabajo. No obstante, a pesar de los beneficios de la vacunación contra la influenza, implementar un programa de vacunación sigue estando fuera del alcance de muchos países de bajos ingresos. Este fue el caso de Laos, donde hace dos años (2012) se ofreció por primera vez la vacuna contra la influenza estacional a través de un programa nacional gracias a la PIVI. Nicaragua es uno de los tantos países que ya ha ofrecido la vacuna contra la influenza pero con la ayuda de la PIVI este año y el año pasado pudo ampliar la campaña de vacunación e incluir a más embarazadas.

Entre los donantes de la PIVI de este año figuran algunos socios que han regresado como bioCSL , que este año donó tres cuartos de millones de dosis de vacunas, y Walgreens Company y Amerisource Bergen (un nuevo socio) que conjuntamente donaron vacunas contra la influenza y fondos para comprar vacunas a un precio reducido a través del Fondo Rotatorio de la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Además, Becton Dickinson and Company (BD), otro socio que ha regresado, donó suministros auxiliares como jeringuillas y cajas de seguridad. La misión de la PIVI es respaldada por una subvención de la Bill & Melinda Gates Foundation*otorgado en 2013.

Durante las próximas semanas, el programa Nacional de Vacunación del Ministerio de Laos suministrará vacunas para las mujeres embarazadas,, trabajadores de los cuidados de salud, principales funcionarios de gobierno y personas mayores de 50 años. La vacuna será distribuida en todo el país especialmente a través de los hospitales provinciales y de distrito y se distinguirá con un lanzamiento oficial que se realizará en Luang Prabang, Laos el 30 de abril.

Mujeres conversando en la puerta de entrada de una clínica médica.

Para algunos, la infección por el virus de la influenza es la puerta de entrada para la neumonía y otras complicaciones que ponen en riesgo la vida.

Las embarazadas y las personas con ciertas afecciones médicas como el asma y la diabetes corren mayor riesgo de desarrollar complicaciones si contraen influenza.

La mejor manera de prevenir esta enfermedad es vacunarse contra la influenza cada año.

La gran mayoría de los países desarrollados invierten periódicamente en la fabricación de la vacuna contra la influenza que está disponible masivamente cada temporada a través de un programa nacional de vacunación.

Los programas de vacunación siguen estando fuera del alcance de muchos países de bajos ingresos a pesar de los beneficios de la vacunación.

En Nicaragua, la vacuna contra la influenza que ha sido donada está sirviendo de complemento a la vacuna que compró el Gobierno de dicho país. Por lo general, Nicaragua destina las vacunas contra la influenza a niños y trabajadores del sector de la salud; pero este es el segundo año que Nicaragua ha ampliado el programa de vacunación contra la influenza estacional a fin de vacunar a más embarazadas. Las vacunas contra la influenza se están distribuyendo a través de la red de puntos de vacunación que ya existe en el país.

Además de los donantes de este año, otros socios de la PIVI han desempeñado un papel fundamental para que la donación, el envío y la administración de la vacuna contra la influenza sean todo un éxito esta temporada. Un cambio significativo este año ha sido la coordinación del programa de la PIVI a cargo del Center for Vaccine Equity del Task Force for Global Health.

La PIVI comenzó en 2011 como un proyecto piloto y cumplió su primera etapa en 2012, cuando el Ministerio de Salud de Laos lanzó su primer programa de vacunación contra la influenza estacional gracias a la donación de vacunas contra la influenza por parte de Walgreens Company. En 2013, bioCSL con sede en Australia, la Fuerza Aérea del Departamento de Defensa de EE. UU. y BD se unieron a Walgreens como socios y conjuntamente donaron vacunas y suministros que fueron distribuidos por UPS a un costo reducido por segundo año consecutivo. Los donantes colaboraron con los Ministerios de Salud de Laos y Nicaragua y en forma conjunta lograron con éxito hacerles llegar las vacunas contra la influenza a las poblaciones de los respectivos países antes de que la temporada de influenza alcance su pico máximo.

*En el otoño del 2012, el proyecto de la PIVI fue distinguido por el Director de los CDC, Dr. Thomas Frieden, con el Premio a la Innovación del Director de los CDC. Un año más tarde, el proyecto recibió una subvención otorgado por la Bill & Melinda Gates Foundation y poco después el Center for Vaccine Equity del Global Health Task Force se unió al grupo como parte de la secretaría y el proyecto fue nombrado oficialmente como Partnership for Influenza Vaccine Introduction (PIVI).

La misión de la PIVI es ayudar a los países en vías de desarrollo a incorporar las vacunas contra la influenza estacional e implementar programas sostenibles para proteger a aquellas personas que corren mayor riesgo de morbilidad y mortalidad a causa de las epidemias anuales de influenza.

La PIVI desempeña un rol fundamental al proveerles las vacunas contra la influenza y los suministros donados a los países que carecen de estos recursos pero que están preparados para implementar o ampliar los programas de vacunación contra la influenza. La planificación de la sostenibilidad y la evaluación de programa a nivel país también son elementos claves de la misión de la PIVI.

La influenza es una enfermedad mundial que año a año tiene un impacto negativo en la salud de millones de personas de todo el mundo. La visión de la PIVI a largo plazo está dirigida a todas las personas del mundo, en especial a las personas de alto riesgo, para que tengan acceso equitativo a la vacuna contra la influenza estacional. El hecho de colaborar con la PIVI permite que ciertos países aprendan a gestionar un programa de vacunación contra la influenza estacional, integrarlo a su base de evidencias y atraer más recursos. Por último, el plan de sostenibilidad para cada programa varía según cada país, desde la capacidad de fabricación por parte de un país hasta la negociación en la fijación de precios entre el fabricante de la vacuna y el país en cuestión.

Afiche de la Organización Mundial de la Salud por la Semana Mundial de la Inmunización. Vacunarse para un futuro saludable.

Se está llevando a cabo una campaña de vacunación contra la influenza en Nicaragua durante la Semana de la Vacunación en las Américas (VWA). La VWA es parte de una iniciativa de alcance global denominada Semana Mundial de la Inmunización que es reconocida por todas las regiones de la Organización Mundial de la Salud.

La misión de la PIVI es reforzada por la labor complementaria, aunque diferente, de otras organizaciones clave tales como el Plan de Acción Mundial sobre Vacunas contra la Influenza II de la OMS, el programa de elaboración de la vacuna contra la influenza de los Estados Unidos administrado por la Autoridad de Investigación Biomédica Avanzada y de Desarrollo (BARDA), y la Alianza Mundial para el Fomento de la Vacunación y la Inmunización (GAVI).

Además, la misión de la PIVI está alineada con  el plan estratégico internacional de la División de Influenza de los CDC , que está centrado en crear una base de evidencias para el control y la prevención de la influenza a nivel mundial, comunicar los riesgos asociados a la influenza y disminuir el impacto mundial de la influenza a través de la capacitación y asistencia técnica y el aporte de la investigación y el desarrollo institucional.

Como socio de la PIVI, los CDC brindan experiencia técnica y orientación sobre la implementación de los programas de vacunación contra la influenza y además hacen posible la comunicación entre los socios. Además de la PIVI, el Programa Internacional de la División de Influenza de los CDC ayuda a los países con la implementación de sistemas de vigilancia y laboratorio para la influenza.

Las vacunas brindan protección a las embarazadas y a los recién nacidos

Las mujeres embarazadas corren mayor riesgo de presentar complicaciones graves si contraen la influenza. Los cambios que se producen en el sistema inmunitario, el corazón y los pulmones durante el embarazo hacen que las embarazadas sean más propensas a enfermarse gravemente si contraen la influenza. Las enfermedades graves en madres embarazadas pueden ser peligrosas para el feto ya que aumentan la posibilidad de sufrir problemas graves como el parto prematuro. Este es el motivo por el cual los CDC recomiendan que las embarazadas reciban cada año la vacuna contra la influenza. Las embarazadas pueden vacunarse contra la influenza durante cualquier trimestre del embarazo. La vacunación protege a las mujeres embarazadas de la influenza y, a la vez, ellas pueden pasarle anticuerpos de protección a sus bebés en gestación. Estos anticuerpos ayudan a proteger al bebé de la influenza por hasta seis meses después del nacimiento. Los seis primeros meses de vida implican una etapa vulnerable; los bebés no pueden recibir la vacuna contra la influenza hasta los seis meses de modo que la protección trasmitida por la mamá al vacunarse durante el embarazo es una manera de garantizarle la salud al bebé durante los primeros meses de vida.

El año pasado, cuando las embarazadas en Laos se vacunaron contra la influenza, la enfermera les entregó a cada una de ellas una tarjeta y les pidió que la trajeran a la clínica cuando estén por dar a luz. Unas semanas o meses después, cuando las embarazadas regresaron con sus respectivas tarjetas y dieron a luz a sus bebés, se registró el peso del bebé junto con el estado de vacunación contra la influenza de la madre. En un país donde los registros médicos son escasos y a menudo incompletos, esta información le proporcionará a Laos datos significativos en cuanto a la importancia que tiene la vacunación contra la influenza estacional para la salud de las madres y sus bebés. Cabe destacar que campañas similares en otros países han demostrado que la vacunación contra la influenza durante el embarazo guarda correlación con pesos más altos al nacer.

La vacuna contra la influenza llegó sin percances a Laos. Voló a Bangkok desde Alemania y arribó a Vientián en camión.

La vacuna contra la influenza llegó sin percances a Laos. Voló a Bangkok desde Alemania y arribó a Vientián en camión.

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