Alimentación saludable

La alimentación equilibrada incluye:

• Proteínas, que producen y mantienen los músculos. Buenas fuentes de proteínas son las carnes, pescados, frijoles, frutos secos y legumbres.
• Frutas y verduras, que proporcionan vitaminas y minerales esenciales, fibras y otras sustancias que son necesarias para la buena salud. Estos alimentos satisfacen, son naturalmente bajos en grasas y tienen pocas calorías.
• Carbohidratos, que proporcionan energía. Los carbohidratos complejos son una fuente de energía de “liberación mantenida” e incluyen frutas, verduras, cereales y granos. Los carbohidratos simples, o azúcares, proporcionan energía rápida y pueden provenir de la harina blanca, miel, mermeladas, jarabes y frutas deshidratadas.
• Grasas, que proporcionan energía adicional. Las grasas conocidas como “grasas buenas” se pueden encontrar en frutos secos, semillas, aceites de oliva y de colza, y en pescados. Las grasas conocidas como “grasas malas”, que se relacionan con un mayor riesgo de enfermedades cardiacas, se encuentran en la mantequilla y las grasas animales como la de la carne de res.

Sí. La nutrición de las personas con el VIH a veces se ve afectada por circunstancias como las siguientes:

• cambios en el metabolismo del cuerpo;
• medicamentos que pueden causar malestar estomacal;
• infecciones oportunistas que pueden causar dificultades para alimentarse y tragar, como candidiasis oral y sarcoma de Kaposi; y
• alimentos que pueden afectar la terapia antirretroviral (TARV) como las carnes y los pescados crudos.

Cualquiera de estos problemas puede afectar la capacidad del cuerpo de absorber los nutrientes que se necesitan para conservar la buena salud.

Hable con su proveedor de atención médica sobre su alimentación y pregúntele específicamente qué medidas debe tomar para mantener una buena nutrición. Su proveedor de atención médica puede recomendarle que tome vitaminas o suplementos para asegurarse de recibir todos los nutrientes que necesita para llevar una alimentación equilibrada. Él o ella podría remitirlo a un nutricionista o dietista con quien puede hablar sobre sus necesidades nutricionales.