Volumen 3: Nº 2, abril 2006
REVISIÓN
La demencia y sus consecuencias para la salud pública
Daniel P. Chapman, PhD, MSc, Sheree Marshall Williams, PhD, MSc, Tara W. Strine, MPH, Robert F. Anda, MD, MS, Margaret J. Moore, MPH
Citas sugeridas para este artículo: Chapman DP, Williams SM, Strine TW, Anda RF, Moore MJ.La demencia y sus consecuencias para la salud pública. Prev Chronic Dis [serie publicada on-line]
abril 2006 [fecha de la cita]. Disponible en: URL: http://www.cdc.gov/pcd/issues/2006/
apr/05_0167_es.htm.
REVISIÓN PARITARIA
Resumen
Introducción
Dado el progresivo envejecimiento de la población estadounidense, es fundamental para el futuro de la salud pública comprender mejor cómo se manifiesta la demencia y el impacto que ésta puede tener. Demencia es un término que no se aplica a una única enfermedad sino a varios síndromes que se caracterizan por diversos deterioros conductuales, cognitivos y
emocionales. Dado que la demencia es muy costosa tanto en términos de sufrimiento personal como de pérdidas económicas, es importante que la salud pública y los prestadores de servicios médicos comprendan la prevalencia de esta enfermedad, sus factores de riesgo y las posibles intervenciones. Recientemente se han producido avances que permiten comprender mejor cómo
se manifiesta y se desarrolla la enfermedad, y cuáles son las intervenciones más adecuadas.
Métodos
La búsqueda de los artículos que serían analizados se realizó principalmente por medio de una búsqueda en Medline, utilizando como palabras y frases clave demencia, deterioro cognitivo leve, enfermedad de Alzheimer, demencia vascular, demencia frontotemporal y demencia con cuerpos de Lewy. También se encontraron otros estudios afines mediante una
búsqueda en Medline que utilizaba las palabras clave enfermedades mentales y estigma.
Resultados
La demencia representa una amplia variedad de síndromes que se caracterizan por problemas de memoria, de la función cognitiva y conductuales. Los síntomas asociados a la demencia aparecen de forma progresiva a lo largo de un continuo, incluso con manifestaciones iniciales que, aunque leves, inmediatamente afectan la salud de los adultos mayores y que ameritan una intervención.
Para promover el funcionamiento cognitivo y la independencia de los adultos mayores, las intervenciones de salud pública deben facilitar tanto la detección precoz como el tratamiento de la demencia. Es importante poder acceder a centros de atención diurnos para adultos y a servicios de relevo para preservar la salud y la calidad de vida de las personas a cargo del cuidado de adultos
mayores con demencia. Los avances más recientes en el tratamiento de la demencia permiten enlentecer el deterioro cognitivo, mejorando la calidad de vida de los adultos mayores y disminuyendo los costos vinculados a la atención en instituciones especializadas.
Conclusión
A pesar de la creciente disponibilidad de intervenciones farmacológicas y psicosociales que podrían ayudar a las personas con demencia y a las personas a cargo de su cuidado, la mayoría de los adultos mayores con demencia no recibe el tratamiento adecuado. Dado el envejecimiento que se está produciendo en la población estadounidense, la salud pública debe tomar
medidas para fomentar la conciencia de la población sobre la demencia y los tratamientos disponibles, así como para evitar la estigmatización de la enfermedad.